Psicopedagogía ¿a domicilio?

Hay pacientes que llegan derivados a la consulta directamente con la indicación de tratamiento a domicilio. No tengo mucha experiencia en esto, pero sí atiendo y he atendido un par de casos bajo esta modalidad, y que me han planteado varios dilemas.

Sin embargo veo en las supervisiones que es más frecuente de lo que yo estaba enterada. Hay profesionales que atienden a domicilio por que:

🚕 el/la paciente es un/a niño con algún impedimento, por ejemplo para trasladarse con lo cual se garantiza que tenga los apoyos necesarios.

🚙 O porque son chicos que tienen muchas horas de terapia y así se garantiza que la familia pueda organizar la totalidad de los apoyos.

🚌 O durante una temporada y por alguna novedad/dificultad en la familia no podrían llevar al paciente al consultorio y se hace este pacto para dar continuidad.

Pero también veo que es porque la familia pide este servicio a domicilio (🤔!!) por las actividades que todos tienen, agendas complicadas, varios hijos, poca disponibilidad para trasladarse. O por propuesta del /la profesional por otros motivos que hacen a su propia organización.

¿Qué pienso sobre esto?

Pienso que

👉🏼 si el encuadre es claro,

👉🏼 si las razones por las que la sesión es en la casa del niño son válidas

👉🏼 y si todos estamos de acuerdo,

puede funcionar.

Pero

🤚🏼 si es por comodidad o porque la familia evade el compromiso que conlleva sostener un tratamiento y se desacomodan los roles, creo que se desdibuja lo que estamos haciendo. Y lamento mucho que esto así sea porque nos es bueno para el paciente y su familia, pero también porque afecta a la profesión.

Sin embargo,

👍🏼cuando se implementa bien,

👍🏼la profesional trabaja a gusto,

👍🏼la intervención es ajustada al motivo de consulta, y

👍🏼se pueden evaluar los progresos, lo veo muy bien.

Básicamente porque tengo la convicción de que la psicopedagogía debe estar y dar ayudas a quienes lo necesitan sea por el motivo que sea y sin que haga falta un escritorio. Eso es lo que pienso. Siempre que el aprendizaje esté complicado, la psicopedagogía debe dar respuesta desde sus herramientas, debemos poder dar y estar y acercarnos a quienes lo demanden para promover el dominio de sí mismo, para ayudar a descubrir la magia y el placer del conocimiento.

Entonces me empecé a informar sobre cómo se trabaja cuando van a domicilio.

Pregunté cómo manejan sus pautas.

Si los horarios y espacios de trabajo se mantienen a rajatabla. Si los materiales son aportados por la profesional. Si sienten que hay un plan y objetivos de trabajo claros y especificados, y si eso colabora en mantener la claridad de lo que el tratamiento viene a cumplir.

Pareciera que ahí está la clave. Nuevamente se trata de cuestiones de encuadre.

Pero también me han referido dificultades con cuestiones simples que escapan del control de la profesional y que causan mucho malestar. Por ejemplo cuánto tarda la familia en abrir la puerta para empezar o para salir, produciendo demoras inmanejables. Algo tan menor pero que es nombrado y padecido. Ese tiempo perdido al inicio de la sesión se traslada al horario? O se cierra la sesión cumplido el horario como en el consultorio? Y si la psicopedagoga llega tarde por imponderables de la calle, eso se compensa o se mantiene?

Más comentarios: Los materiales ¿quedan en la casa? ¿Se arma una caja o espacio que se respeta? ¿se pueden utilizar fuera de la sesión? Y cuando el paciente trae sus juegos o dispositivos?

¿La sesión se lleva adelante a puertas cerradas? ¿El lugar de trabajo es un espacio con tránsito? ¿Se trabaja con la presencia/ vigilancia de alguien?

¿Y cuando necesitan entrevistar a los padres, cómo se hace? Se reúnen en el consultorio? Se toman un rato en la casa? Dónde está el hijo mientras tanto? Se deja de trabajar con los padres por falta de oportunidad de estas entrevistas?

No puedo evitar preguntarme si el rol de la Psicopedagogía en este contexto es claro, si puede confundirse con el de una maestra particular o una estimuladora.

Puedo contar mi experiencia y es que me fue muy bien cuando conté con un espacio adecuado a mi plan y la comodidad de manejarme según mis reglas. No me juzguen! soy grande y sé trabajar de esta manera.

Pero en una ocasión, uno de mis fracasos, todo se presentaba de otra manera y bajo otras condiciones. Y tengo que decirlo, no pude atenderlos y tuve que derivar. Ellos tampoco aceptaban venir al consultorio, donde yo sentía que podía proponer otra dinámica, con otros materiales, otro formato de trabajo.

Lo que me quedo pensando y me guía es que si en mi consultorio, en el tratamiento puedo entrar y salir de la actividad, reformular, volver a proponer, frenar y reiniciar, cuando voy a domicilio puedo hacer lo mismo?

Cuéntenme cómo hacen ustedes. Se puede trabajar a domicilio? Cómo se organizan y qué pautas sostienen? Y si mantienen un modelo de encuadre ortodoxo o se trata de otra modalidad de trabajo.»

Nos seguimos leyendo y la semana que viene por favor 🙏 no se pierdan una nota de lujo total 🌟✨, celebrando el día de la Psicopedagogía.

María Inés Acuña
Psicopedagoga